Commentary by Dermidio Juez-Perez
According to a 2014 article posted online at Bloomberg.com, 52 percent of teens worked in the year 2000. However, that number has dropped significantly since then. In 2009, only 33 percent of teens worked – and in 2010, only 16 percent of high school schools had an after-school job, the article stated, relaying information from the U.S. Bureau of Labor Statistics.
So if most teens are no longer working, why should you encourage yours to work part time? For this reason: Having a part-time job while in high school allows your teen to learn many life lessons.
Earning money will provide your teen with a hands-on financial education. As your teen earns and spends money, it gives you as parents an opportunity to teach your teen about money management. Paying taxes, contributing to car expenses, building a college fund and creating a budget are all lessons that many people don’t learn until years after graduating from college.
Working during high school also will prepare your teen for a tough job market. Decades ago, someone with a college degree automatically had a good job. Today, however, the job market tends to favor those with experience. Students who work during their high school and college years will have an easier time getting a good entry-level job after graduation.
Moreover, working part time job during high school gives teens fewer opportunities to get into trouble. One way or another, employers offer a sort of adult supervision for teen workers, giving them a productive activity beyond their schoolwork.
In addition to the above benefits, working as a teen-ager builds confidence. While working, teens learn how capable they are of accomplishing tasks, which helps them build confidence and self-reliance.
All of these benefits are important life lessons. So encourage your teen to work part time, but make sure he or she can balance after-school work with studying, family time and a social life.
Trabajar durante la preparatoria ofrece muchos beneficios
Según un artículo de 2014 publicado en Bloomberg.com, el 52 por ciento de los adolescentes trabajó en el año 2000. Sin embargo, ese número ha disminuido considerablemente desde entonces. En 2009, sólo el 33 por ciento de los adolescentes trabajó – y en 2010, sólo el 16 por ciento de los alumnos de escuelas secundarias tenían un trabajo después de la escuela.
Si la mayoría de los adolescentes no están trabajando ¿por qué debería alentar a mi hijo o hija a trabajar durante la secundaria? Por esta razón: Tener un trabajo de medio tiempo en la escuela secundaria le permite a su hijo aprender muchas lecciones de vida.
Ganar dinero proporcionará a su adolescente con una educación financiera práctica. A medida que su hijo gana y gasta dinero, le da a los padres la oportunidad de enseñarle a su hijo sobre la administración del dinero. Pagar impuestos, contribuir a los gastos del coche, ahorrar para la universidad y la crear un presupuesto son todas lecciones que muchas personas no aprenden hasta años después de graduarse de la universidad.
Trabajar durante la preparatoria también preparará a su hijo para un duro mercado de trabajo. Hace décadas, alguien con un título universitario automáticamente tenía un buen trabajo. Hoy en día, sin embargo, el mercado de trabajo tiende a favorecer a aquellos con experiencia. Los estudiantes que trabajan durante sus años de escuela secundaria y universidad tendrán más facilidad a la hora de obtener un buen trabajo.
Por otra parte, el trabajo durante la escuela secundaria le da a los adolescentes menos oportunidades de meterse en problemas. De una manera u otra, los empleadores ofrecen una especie de supervisión de adultos para los trabajadores adolescentes, dándoles una actividad productiva más allá de sus tareas escolares.
Además de los beneficios anteriores, el trabajo creará confianza en sí mismo en su adolescencia. Mientras trabajan, los adolescentes aprenden lo capaces que son de llevar a cabo las tareas, lo que les ayuda a construir la confianza y la autoestima.
Todos estos beneficios son importantes lecciones de vida. Por lo tanto, aliente a su hijo a conseguir un trabajo de medio tiempo, pero asegúrese de que él o ella pueda equilibrar el trabajo después de la escuela con el estudio, el tiempo de la familia y una vida social.