Las bromas y memes que ha provocado el último tatuaje en japonés de Ariana Grande, incluso después de que intentara solucionar el error ortográfico que incluía la versión original, han acabado por pasarle factura a la cantante.
En un primer momento la estrella del pop trató de sobrellevar con paciencia y sentido del humor el revuelo que provocó el diseño, explicando que la única culpable de que acabara con una serie de caracteres kanjis en la palma de la mano que se traducían como ‘shichirin’ -un tipo de barbacoa pequeña- era ella, ya que no había sido capaz de aguantar el tiempo necesario para completar la expresión que debía hacer referencia a su sencillo ‘7 Rings’ [Siete anillos] porque resultaba demasiado doloroso.

Editorial: A fundamental part in America’s story
Hispanic Heritage Month opened Monday, September 15. There’s a pressing question to consider seriously – would there be a United States of America today without