
By Tere Siqueira
In Missouri, controversial immigration legislation has sparked a heated debate.
At the heart of the discussion is Senate Bill 72, introduced by Republican Senator David Gregory of Chesterfield, which proposes a $1,000 bounty for tips leading to the arrest of undocumented immigrants. Critics, including legal advocates and community leaders, have called the measures inhumane, with one witness going as far as labeling a state senator a “fascist” during a tense legislative hearing.
Senator Gregory’s bill would establish the “Missouri Illegal Alien Certified Bounty Hunter Program,” allowing licensed bounty hunters to apprehend individuals accused of being undocumented immigrants. Those arrested could face life in prison without parole if federal immigration officials decline to take custody, a move Gregory has described as creating “an ICE program at the state level.”
Missouri isn’t stopping there. Another proposal, House Bill 120, spearheaded by Republican Representative Jim Murphy of St. Louis County, would impose new verification requirements on private employers to confirm their employees’ immigration status. Businesses that fail to comply could face license suspensions and felony charges after repeat offenses.
Senator Jill Carter of Joplin has also introduced legislation targeting undocumented individuals, including the creation of new crimes such as “improper entry” and “aggravated illegal presence,” with penalties ranging from fines to felonies for violating Missouri laws.
Critics argue these bills would encourage racial profiling and perpetuate fear. State Senator Barbara Washington, a Kansas City Democrat, warned that the bounty program could lead to reports being made based on skin color or language proficiency.
The debate also comes amid economic concerns. According to a January report by a Missouri House interim committee, undocumented immigrants contributed approximately $113 million in state taxes in 2022, supporting 160,000 jobs and generating $19 billion in economic activity. Washington challenged Gregory during the hearing, asking if the state should sacrifice this economic contribution for a zero-tolerance policy on undocumented immigrants. Gregory’s response: “Yes.”
Despite the backlash, proponents argue these measures are necessary to address crimes tied to illegal immigration, including human and drug trafficking. Supporters also pointed to federal court rulings in states like Iowa and Texas that have blocked similar measures, suggesting that Missouri’s laws could help navigate legal challenges at the state level.
The proposed bills in Missouri could represent an escalation in state-level involvement in immigration enforcement, potentially setting a precedent for other states.
If passed, Senate Bill 72 would take effect on Aug. 28, while House Bill 120 would go into effect on Jan. 1, 2026. However, these proposals still face hurdles, with mounting public opposition and potential legal challenges looming. Critics argue the policies are not only extreme but also divisive, threatening Missouri’s social fabric and economic stability.
Leyes de inmigración de Missouri generan controversia
En Missouri, una polémica legislación sobre inmigración ha desatado un acalorado debate. En el centro de la discusión está el Proyecto de Ley del Senado 72, presentado por el senador republicano David Gregory, de Chesterfield, que propone una recompensa de $1,000 por información que lleve al arresto de inmigrantes indocumentados. Críticos, incluidos defensores legales y líderes comunitarios, han calificado las medidas como inhumanas, con un testigo llegando a llamar “fascista” a un senador estatal durante una tensa audiencia legislativa.
El proyecto de ley del senador Gregory establecería el “Programa de Cazadores de Recompensas Certificados para Extranjeros Ilegales de Missouri”, permitiendo a cazadores de recompensas con licencia detener a individuos acusados de ser inmigrantes indocumentados. Los arrestados podrían enfrentar cadena perpetua sin libertad condicional si las autoridades federales de inmigración se niegan a tomar custodia, una medida que Gregory describió como la creación de “un programa de ICE a nivel estatal”.
Missouri no se detiene ahí. Otra propuesta, el Proyecto de Ley 120 de la Cámara de Representantes, liderado por el representante republicano Jim Murphy, del condado de St. Louis, impondría nuevos requisitos a empleadores privados para verificar el estatus migratorio de sus empleados. Las empresas que no cumplan podrían enfrentar la suspensión de sus licencias y cargos criminales después de violaciones reiteradas.
La senadora Jill Carter, de Joplin, también ha propuesto legislación dirigida a personas indocumentadas, incluyendo la creación de nuevos delitos como “entrada indebida” y “presencia ilegal agravada,” con sanciones que van desde multas hasta delitos graves por violar leyes de Missouri.
Los críticos argumentan que estos proyectos de ley fomentarían la discriminación racial y perpetuarían el miedo. La senadora estatal Barbara Washington, una demócrata de Kansas City, advirtió que el programa de recompensas podría llevar a denuncias basadas en el color de piel o la capacidad de hablar inglés.
El debate también surge en medio de preocupaciones económicas. Según un informe de enero de un comité provisional de la Cámara de Representantes de Missouri, los inmigrantes indocumentados contribuyeron con aproximadamente $113 millones en impuestos estatales en 2022, apoyando 160,000 empleos y generando $19 mil millones en actividad económica. Washington desafió a Gregory durante la audiencia, preguntándole si el estado debería sacrificar esta contribución económica por una política de tolerancia cero contra los inmigrantes indocumentados. La respuesta de Gregory fue: “Sí”.
A pesar de las críticas, los defensores argumentan que estas medidas son necesarias para abordar crímenes relacionados con la inmigración ilegal, incluyendo la trata de personas y el tráfico de drogas. También señalaron fallos judiciales en estados como Iowa y Texas que han bloqueado medidas similares, sugiriendo que las leyes de Missouri podrían ayudar a superar desafíos legales a nivel estatal.
Los proyectos de ley propuestos en Missouri podrían representar una escalada en la participación estatal en la aplicación de las leyes de inmigración, potencialmente sentando un precedente para otros estados.
Si se aprueban, el Proyecto de Ley del Senado 72 entraría en vigor el 28 de agosto, mientras que el Proyecto de Ley 120 de la Cámara de Representantes comenzaría a aplicarse el 1 de enero de 2026. Sin embargo, estas propuestas aún enfrentan obstáculos, con una creciente oposición pública y posibles desafíos legales en el horizonte. Los críticos argumentan que estas políticas no solo son extremas, sino también divisivas, amenazando el tejido social y la estabilidad económica de Missouri.