Last month, the Shawnee Mission School Board approved boundary changes for one-quarter of the district’s 33 elementary schools. The eight schools involved are Broken Arrow, Christa McAuliffe, Lenexa Hills, Mill Creek, Rhein Benninghoven, Rising Star, Shawanoe and Sunflower. The boundary changes will launch with the 2018-2019 school year and affect about 1,000 pre-K through 6th-grade students.
School officials devised the boundary changes to address overcrowding in some schools and under-enrollment in others and to prepare for the 2018 opening of the new Lenexa Hills Elementary at 87th Street Parkway and Haven Street. Though the plan passed, the June 1 school board vote wasn’t unanimous, nor did all families impacted approve of the changes.
Board member Patty Mach, who voted no on the changes known as “Plan A,” had proposed some adjustments back in May and urged delaying the vote to consider her amendments. They were based on comments and concerns she’d received from constituents, she said.
But feedback from parents district-wide, according to school officials was about evenly split between Plan A and Mach’s proposal, known as “Plan B.” Parents were also reportedly divided over whether to approve boundary changes right away or delay a decision to more fully consider both plans.
Valid arguments were made both for enacting redistricting now and for postponing a decision. The first option gives parents in the affected schools time to prepare and school officials breathing space to anticipate transportation and staffing needs. On the other hand, additional time to consider the merits of both plans could result in changed boundaries that are less disruptive, more effective for all schools involved and impact fewer families.
There was a concern raised, too, that not all families had adequate opportunity to weigh in on the proposed changes. The school district had disseminated most of the information about the boundary changes in English, parents pointed out. That put households that speak English as a second language at a disadvantage.
But Plan A passed, and now families affected by the changes are receiving information from the district about the next steps. It will be a process, and it won’t be painless. Some students will travel farther to school. It will take the “neighborhood” out of “neighborhood school,” some parents claimed. PTAs and neighborhoods will be split up, eliminating stabilizing community anchors, others asserted.
According to the National Association of Realtors, good neighborhood schools are among the top draws for home buyers. It’s safe to suppose that there are families affected by the school boundary changes who selected their home because of its proximity to the closest elementary school.
Redrawing the school attendance boundary lines may have been unavoidable, as board members claim, but we mustn’t lose sight of the urgency of keeping intact quality neighborhood elementary schools.
Preservar las escuelas primarias del vecindario
El mes pasado, el Consejo de la escuela Mission Shawnee aprobó cambios de límites de distritos escolares para una cuarta parte de las 33 escuelas primarias del distrito. Broken Arrow, Christa McAuliffe, Lenexa Hills, Mill Creek, Rhein Benninghoven, Rising Star, Shawanoe y Sunflower son las ocho escuelas involucradas. Los cambios en los límites se pondrán en marcha en el año escolar 2018-2019 y afectarán a unos 1,000 estudiantes desde preescolar hasta 6º grado.
Los funcionarios de la escuela idearon los cambios en los límites para hacer frente a la sobre población en algunas escuelas y la falta de alumnos en otras y para prepararse para la inauguración en 2018 de la nueva primaria Lenexa Hills en el 87 de la calle Parkway y la calle Haven. Aunque el plan fue aprobado, la votación del Consejo Escolar del 1 de junio no fue unánime, ni todas las familias estuvieron de acuerdo en aprobar los cambios.
Patty Mach, miembro de la Junta Directiva, que votó por los cambios conocidos como “Plan A”, había propuesto algunos ajustes en mayo e insistió en retrasar la votación para considerar sus reformas. Mencionó que se basaron en comentarios y preocupaciones que había recibido de los votantes.
Sin embargo, los comentarios de los padres en todo el distrito, según los funcionarios de la escuela, estaban divididos en partes iguales entre el Plan A y la propuesta de Mach, conocida como “Plan B.” Los padres también estaban divididos sobre si aprobarían los cambios fronterizos de inmediato o si considerarían ambos planes.
Se presentaron argumentos válidos tanto para ejecutar la redistribución de distritos como para posponer una decisión. La primera opción da a los padres en las escuelas afectadas tiempo para prepararse y a los funcionarios escolares tiempo para anticipar las necesidades de transporte y del personal. Por otro lado, el tiempo adicional para considerar los beneficios de ambos planes podría resultar en cambios de límites que sean menos perturbadores, más efectivos para todas las escuelas involucradas e impacten a menos familias.
También se planteó la preocupación de que no todas las familias tuvieran la oportunidad adecuada de sobrellevar los cambios propuestos. El distrito escolar había difundido la mayor parte de la información sobre los cambios en el límite en inglés, señalaron los padres. Esto pone en desventaja a los hogares que hablan inglés como segunda lengua.
Pero el Plan A pasó, y ahora las familias afectadas por los cambios están recibiendo información del distrito sobre los próximos pasos. Es un proceso y no será fácil. Algunos estudiantes viajarán más lejos a la escuela. Quitará el “vecindario» de la «escuela del vecindario», afirmaron algunos padres. Los PTA y los vecindarios se dividirán, eliminando los pilares comunitarios estabilizadores, afirmaron otros.
Según la Asociación Nacional de Agentes de Bienes Raíces, las escuelas de los buenos vecindarios están entre las principales características para los compradores de vivienda. Es seguro suponer que hay familias afectadas por los cambios en los límites escolares que seleccionaron su hogar debido a su proximidad a la escuela primaria más cercana.
Volver a marcar las líneas fronterizas de asistencia escolar puede haber sido inevitable, como afirman los miembros del consejo, pero no debemos perder de vista la urgencia de mantener intactas las escuelas primarias de calidad.