By Tere Siqueira
The Midwest is reportedly witnessing a modest resurgence in union activities, as workers confront growing job insecurity and dissatisfaction with wages and working conditions.
This trend, highlighted in reports by diverse media outlets, extends across various sectors traditionally unrelated to organized labor. Labor law expert Michael Duff, a former union member and current professor, acknowledges an increased interest in union membership within the past five years. In 2022, for example, major work stoppages involving 1,000-plus workers reached 23, marking an upswing from previous years but still lower than the 1970s, Duff said, as reported by KCUR-FM (89.3) via The Midwest Newsroom.
As The Midwest Newsroom also reported, Kansas, Iowa and Nebraska experienced small increases in union membership rates from 2021 to 2022. For Kansas and Nebraska, the growth was in keeping with strides made in union membership between 2012 and 2022.
Nationally, roughly 14.3 million waged and salaried workers were union members in 2022 – up 2 percent from 2021 and roughly 10 percent of America’s workforce, according The Midwest Newsroom, citing U.S. Bureau of Labor data.
Unions might see more membership after the strikes staged this fall in Missouri, Ohio and Michigan by the United Auto Workers. The strikes, which drew extensive media coverage, led to pay rises, among other benefits.
Pay raises and benefits aren’t the only issues unions are addressing as 2024 approaches. Workplace safety and workplace dignity have been areas of focus, too. In June, for example, more than 2,000 nurses working for the Ascension health care system in Kansas and Texas went on a daylong strike. Represented by National Nurses United, their primary concerns were staffing, equipment shortages and patient safety.
Multiple media outlets reported recently that Ascension nurses staged another strike in early December.
El medio oeste experimenta un aumento en las actividades sindicales
Se informa que el medio oeste está presenciando un modesto resurgimiento en las actividades sindicales, ya que los trabajadores enfrentan una creciente inseguridad laboral y descontento con los salarios y las condiciones de trabajo.
Esta tendencia, destacada en informes de diversos medios de comunicación, se extiende a través de varios sectores tradicionalmente no relacionados con el trabajo organizado. El experto en derecho laboral Michael Duff, ex miembro de un sindicato y actual profesor, reconoce un interés creciente en la afiliación sindical en los últimos cinco años. En 2022, por ejemplo, se alcanzaron 23 grandes paros laborales que involucraron a más de 1,000 trabajadores, lo que marca un aumento con respecto a años anteriores pero aún es inferior a los años 70, dijo Duff, según informó KCUR-FM (89.3) a través de The Midwest Newsroom.
Como también informó The Midwest Newsroom, Kansas, Iowa y Nebraska experimentaron pequeños aumentos en las tasas de afiliación sindical de 2021 a 2022. Para Kansas y Nebraska, el crecimiento estuvo en línea con los avances logrados en la afiliación sindical entre 2012 y 2022.
A nivel nacional, aproximadamente 14.3 millones de trabajadores asalariados y con salario fueron miembros de sindicatos en 2022, un aumento del 2 por ciento con respecto a 2021 y aproximadamente el 10 por ciento de la fuerza laboral de Estados Unidos, según datos de la Oficina de Estadísticas Laborales.
Los sindicatos podrían ver más miembros después de las huelgas realizadas este otoño en Missouri, Ohio y Michigan por los United Auto Workers (Trabajadores Automotrices Unidos). Las huelgas, que recibieron una amplia cobertura mediática, llevaron a aumentos salariales, entre otros beneficios.
Los aumentos salariales y los beneficios no son los únicos temas que los sindicatos están abordando a medida que se acerca 2024. La seguridad en el lugar de trabajo y la dignidad laboral también han sido áreas de enfoque. En junio, por ejemplo, más de 2,000 enfermeras que trabajan para el sistema de salud Ascension en Kansas y Texas realizaron una huelga de un día. Representadas por National Nurses United, sus principales preocupaciones eran el personal, la escasez de equipos y la seguridad del paciente.
Varios medios de comunicación informaron recientemente que las enfermeras de Ascension realizaron otra huelga a principios de diciembre.
